jueves, 23 de mayo de 2013

SG 18- Jardín Botánico

Aprovechando mi segundo día del pase, hoy decidí tomar el bus que hace otro recorrido. Esta vez no pasaba por el Chinatown, así que tuve que ir a tomarlo a Clarke Quay. De día el sector se veía tan entretenido como de noche, con la fila interminable de cafés y restaurants, además de algunas tiendas y el pasar de los botes que navegaban por el río.



Cuando llegó el bus vi el mapa que me entregaron el día anterior y según la lista de atracciones de la ciudad, una que debía conocerse era el Jardín Botánico de Singapur. Mientras llegábamos, la grabación nos contaba que dicho jardín tiene más de 150 años de antigüedad y junto con el de Río de Janeiro, es el único que tiene una selva tropical en su interior.



Al llegar me entregaron un mapa y me sorprendí cuando me dijeron que la entrada era gratuita, excepto por un sector con Orquídeas que tiene más de 1000 especies distintas. Comencé mi recorrido yendo hacia "el lago de los cisnes" y en el camino vi a varios trabajadores preocupándose que todo estuviera ordenado, ya sea cortando malezas, limpiando estatuas, barriendo hojas o regando. El resultado era un parque impecable en el que daba gusto caminar.


No siendo un fanático de las plantas debo reconocer que me entretuve bastante, sobre todo con un sector que sólo tenía arbolitos "bonsai". Recuerdo haber visto en vivo unos pocos antes, pero los que estaban acá me gustaron más, porque realmente tenían forma de árboles grandes. Mi favorito fue uno que tenía la forma de ese típico árbol solitario que aparece en las imágenes de los horizontes de África.



Otro sector que disfruté fue el de la selva tropical. Era interesante cómo al internarse se opacaban los ruidos externos y destacaban los de los pájaros, aunque no pude ver a ninguno. Al caminar de vuelta a la entrada me encontré con un par de lagartos de un poco más de un metro de largo que iban atravesando el camino. Uno era muy tímido y trataba de esconderse entre los árboles, mientras que el otro se quedó casi como posando para las fotos.


A las 3 horas y faltándome toda la otra mitad del parque, decidí tomar nuevamente el bus para aprovechar los viajes. Mientras nos alejábamos del Jardín vimos varios hospitales y la grabación nos contaba que Singapur recibe un gran número de "turistas de la salud" de los países vecinos ya sea para realizarse cirugías estéticas o procedimientos más delicados, ya que el país es conocido por tener la tecnología más avanzada en el área médica. Cerca de los hospitales vimos casas que en promedio costaban 5 millones de dólares y al final del sector me bajé en la avenida Orchard, una homóloga a la 5ta Avenida de New York.

Después de pasear por algunas tiendas tomé nuevamente el bus y fuimos hacia la rueda gigante que queda cerca de la bahía. No me animé a subir y seguí el recorrido hasta que llegamos a la Esplanade, frente al distrito financiero y donde están los teatros. Al caminar por ahí me pasaron un folleto en el cual se publicitaban shows que se llevaban a cabo casi todos los días. Había uno que empezaba en 20 minutos y consistía en una pequeña orquesta clásica que reproducía canciones de películas de terror. Fui a verlo y me gustó harto, destacando las canciones de "Drácula" y "Alien". Al final mostraban cómo se hacían algunos de los efectos sonoros que siempre escuchamos en las películas en esos momentos de suspenso; me sorprendí mucho al ver que se hacían golpeando las cuerdas del piano o las de los violines.

Al terminar salí y me encontré con otro concierto, en un escenario simple pero precioso bordeando la bahía, ésta vez de un grupo de 5 chinos que modificaban canciones conocidas con letras graciosas. Por suerte la mayoría estaba en ingles, así que me divertí bastante. Las pocas canciones en chino también deben haber estado muy buenas, porque sacaban varias carcajadas de la audiencia.



Dejo un video de ambas presentaciones en la Esplanade: